Rendirse y flotar

y que la corriente te lleve donde te tenga que llevar

Si la vida es continuo cambio, ¿por qué existimos las personas a las que nos dan tanto miedo los cambios? ¿Es una broma del Universo o simplemente estamos condenadas a la extinción? 🙄

Cuando digo que me dan miedo los cambios quiero decir que ME DAN MIEDO LOS CAMBIOS, que enfrentarme a algo nuevo me quita el sueño y me paraliza, que prefiero quedarme en lugares que no me gustan nada antes que tener que salir de ahí, descubrir, conocer y adaptarme a nuevos lugares, personas y situaciones.

Pero parece que cuanto más miedo al cambio tienes, más zarandeos te mete la vida. Te invita a moverte con ella, pero tú te haces la loca, te inventas una excusa y pasas de la invitación por esta vez. Y te invita otra vez, y te inventas otra excusa. Y luego otra. Y otra. Y esperas que un día la vida se canse de insistir y te deje tranquila en tu cueva oscura y fría, pero con sofás cómodos.

Pero no, amiga, la vida no se cansa de insistir; de lo que se cansa es de tus excusas de mierda, así que la cabrona asoma el día que menos te esperas, te coge de los pelos, te saca fuera de tu cueva y tapia la puerta para que no puedas volver a entrar.

“Ale, no has querido moverte por las buenas, así que te mueves por las malas.”

Siempre he escuchado que si estás en el mar y de repente te lleva una corriente, lo que debes hacer es nadar a su favor y no en contra de ella, porque sino acabarás por agotarte y morir ahogada. Pues resulta que con la vida pasa igual, que cuando la vida quiere moverte de sitio, o te mueves o te mueves, y que cuanta menos resistencia pongas, menos complicado será el cambio.

Sobresaliente en teoría pero suspensa en práctica, esa soy yo.

La vida ya llevaba un tiempo tocándome el hombro, mandándome Whatsapps, tirándome de la mano, y susurrándome al oído que era hora de moverme, y parece que éste ha sido su tope de paciencia, porque enero ha llegado con cambios de esos que te mueven hasta la fecha de nacimiento.

En el fondo de mí (muy muy en el fondo) tengo una sensación rara de calma, porque hasta ahora siempre he vivido aprendizajes imprescindibles después de cada cambio y sí que van a llegar cosas buenas, pero también hay mucho miedo, incertidumbre y malestar.

Esta vez me he rendido pronto, he dejado de nadar, me he quedado flotando, mirando al cielo, respirando suave y dejando que la corriente me lleve donde me tenga que llevar.

Rendirse como sinónimo de autocuidado.

Fíjate qué gracia (es cero gracioso) que justamente uno de mis objetivos para este año era planificarme más y mejor, y ahora resulta que me toca ir donde el viento me lleve, hacerme amiga de la incertidumbre e improvisar sobre la marcha.

Y en este dejarme llevar e improvisar, también entra mi negocio. Me hubiera gustado compartirte este mes las fechas de los talleres de retrato que haré este año para que puedas organizarte y elegir la que te venga mejor, y las de los talleres de revelado, y las de los viajes a otras ciudades donde vaya con agenda abierta para Sesiones Íntimas.

Pero por ahora lo único que te puedo confirmar es que la semana que viene, el sábado 1 de febrero, haré un taller donde enseñaré a disparar y revelar carretes blanco y negro, que va a ser un taller totalmente práctico donde vamos a aprender mucho y a divertirnos más, que aún quedan plazas y que ahora mismo no estoy nada segura de si este año podré impartir este taller de nuevo, así que la semana que viene vamos a darlo todo para disfrutarlo bien fuerte.

Aquí tienes un poco más de información sobre este Taller de Disparar y Revelar Carretes Blanco y Negro 📍

Por lo demás, te iré contando según vaya sucediendo todo, porque hay cambios pero también hay vida y ganas de vivirla, y hay algunas ideas burbujeando fuerte dentro de mí, y otras ideas que ya están en proceso de creación desde hace un tiempo, y no estoy nada segura de las fechas, pero sí de que esas ideas han llegado a mí para que las las convierta en cosas reales, tangibles y que disfrutemos juntas, así que en cuando pueda, te voy contando.

Si quieres venirte al Taller para aprender a Disparar y Revelar Carretes y gozar mientras aprendes del mágico y maravilloso mundo de la fotografía analógica, puedes escribirme un mail a hola@lydiafdz.com y yo te mandaré toda la información del taller y cómo puedes reservar tu plaza.

Mientras tanto, te recuerdo que si estas cartas las lees desde el email, puedes responder y contarme lo que quieras, y si las lees desde la app de Substack, puedes comentar las publicaciones. Siempre es guay recibir respuestas y no tener esa sensación rara de que hablas al aire.

Hagas lo que hagas, yo te voy a seguir contando cosas, así que hablamos pronto.

Un abrazo grande,

Lydia 🖤